El zapato del bebé. Gateo y primeros pasos

Hoy nos centramos en esta estapa tan importante para el desarrollo de los bebés, como es la fase de gateo, primeros pasos e inicio de la marcha.

Son muchos los padres que se preguntan sobre el tipo de calzado que debe llevar su hijo/a. Vamos a intentar dar unas características que debemos tener en cuenta  a la hora de elegir el calzado adecuado para los más pequeños, siempre y cuando no exista patología alguna, que deberá ser valorado por el pediatra, podólogo o fisioterapeuta que corresponda.

Un zapato para un niño NO ES UN ZAPATO DE ADULTO EN MINIATURA. Se deben respetar las fases del desarrollo general del niño y de los pies en particular.

Hasta el 8º-9º mes de vida, el pie tiene una gran movilidad y posee una sensibilidad táctil más rica que la mano, se los lleva a la boca, los toca, y le sirven para explorar su entorno…por lo tanto, en estos primeros meses no se debería llevar calzado. A lo sumo, si hace frío unos calcetines o “patucos”, que sean transpirables, anchos, ligeros y no opriman, dejando el tobillo libre y espacio suficiente para estirar bien los dedos.

Para esta etapa, cuando no pueden ir descalzos, los zapatos de suela blanda son la mejor opción. Suaves, ligeros, transpirables, antideslizantes y completamente flexibles... son ¡casi como ir descalzo!.

Una vez que el niño/a ha sido capaz de sentarse con estabilidad, aparecerá su interés por el desplazamiento (fase del GATEO). 
Esta fase es importantisima para su desarrollo, tanto presente como futuro y deberemos fomentarla dejanto libertad de movimiento y desplazamiento en el suelo (con precaución). Hablaremos del movimiento libre en una próxima entrada. Sólo señalar que esta fase, junto con los primeros pasos y la consolidación de la marcha, aporta las bases futuras de lateralidad cruzada, equilibrio, desarrollo muscular y esquelético, y que incluso influye en el proceso de aprendizaje de la lecto-escritura, así que como vemos es más importante de lo que pueda llegar a parecer.

Para este momento, el calzado deberá PROTEGER DEL FRÍO Y DE POSIBLES TRAUMANTISMOS, siendo útiles aquellos que llevan algún refuerzo en la puntera, pero seguirán siendo unos "zapato-guante" blandos, ligeros, de materiales transpirables y de suela super flexible.

Durante este gateo activo, y conforme va adquiriendo por sí mismo la capacidad para dar los primeros pasos, habrá llegado el momento de comprar sus primeros zapatos con suela

El calzado más adecuado es la gama de bobux explorer, diseñados específicamente para esta etapa del desarrollo tan delicada.

El pie y todas sus articulaciones deben poder MOVERSE LIBREMENTE dentro del zapato, para que puedan formarse correctamente y no retrasar el aprendizaje. Dos de estas articulaciones son especialmente importantes: la del tobillo, y la que forman los huesos de los dedos (falanges) con los de la planta del pie (metatarsianos). De ello, se deducen varias características importantes que debe tener el calzado:
- No tiene que ser bota, el tobillo debe poder moverse libremente (si lo es, debe permitir la movilidad, con una caña ancha cuya única función sea dar un poco más de abrigo para los meses fríos)
- La suela ha de ser muy elástica, especialmente en esta zona donde el pie se flexiona al caminar.
- Materiales transpirables y libres de tóxicos
- Horma ancha, para tener sitio para estirar bien todos los dedos
- Talla adecuada, de 0,8 a 1 cm más que la medida del pié del bebe. (ayuda para calcular la talla)  
- Plantilla interior plana, sin arco o almohadilla que de "forma" al pie (Todos los niños antes de empezar a andar tienen un pie plano fisiológico normal, con la almohadilla grasa que protege la planta del pie. Conforme empieza a dar los primeros pasos, se empieza a formar la bóveda plantar gracias a la acción muscular y a la paulatina desaparición de la almohadilla grasa. Si la bóveda es mantenida artificialmente por el calzado, estaremos inhibiendo la acción de estas fibras musculotendinosas, cuya misión es sostener el arco del pie. Por eso es interesante que los niños anden descalzos (sobre superficies irregulares y con distintas texturas), y los primeros zapatos deben llevar una PLANTILLA PLANA, libre de cualquier añadido)

Como ya he dicho, la gama Explorer de Bobux tiene todas estas características, que permitirán a tu bebé desarrollar unos músculos y tendones fuertes y sanos respetando su ritmo de crecimiento, además de ir protegido gracias a su puntera antiabrasión, y ajustarse con goma y velcro, por lo que son perfectos tanto para la fase de gateo como para la de primeros pasos (y cuando estas dos van unidas) y para la consolidación de la marcha (cuando ya no hay gateo, y se está consolidando la marcha autónoma).

El zapato debe PROPORCIONAR ESTABILIDAD Y AMORTIGUACIÓN, pero respetando siempre las distintas etapas del desarrollo del pie, y todos sus movimientos y posturas en las distintas fases de crecimiento.

CONSEJOS PRÁCTICOS:

  • Los zapatos deben ser ligeros y cómodos de poner y de llevar, desde el primer día. Es un error pensar que con el tiempo se irá acostumbrando.
  • No deben intercambiarse con otros niños. No dejarlos en “herencia” a otros niños, constituye una prenda muy personal e intransferible, pues aunque parezcan nuevos por fuera, la parte interna ya tiene vicio de pisada, y eso podría ser perjudicial para el peque que hereda.
  • Debemos tener paciencia con el desarrollo de la estabilidad en la deambulación. Al principio abren mucho la base de sustentación y hacen una “marcha de pato”, otros pueden tener las piernas en X y otros tardar algo más en solucionar su pie plano fisiológico… Sólo previa consulta con un Traumatólogo Infantil se deben prescribir soluciones ortopédicas.
Si necesitas asesoramiento, puedes ponerte en contacto con nosotros, y te ayudamos a elegir los zapatos más adecuados para tu bebé.


Bobux explorer en peucos.es













Comentarios